Satisfacción Garantizada - Llévalo ya!

Estoy parado en la acera de una panadería tomándome un café y esperando a alguien quien me citó para presentarme un proyecto. El proyecto para mi es desconocido pues no me dio detalles pero no se por qué se me metió en la cabeza que podía ser algo novedoso; tal vez porque venía de alguien recién "desempacado" de la universidad y hay que ver cuanta creatividad tienen los universitarios; además me mencionaron cuestiones de empresa, de Internet y la curiosidad me ganó.

Mientras estoy allí en ese lugar desconocido, esperando mi cita, veo llegar alguien que podría ser un "socio" de mi contacto con muy buena apariencia lo cual me da 'buena espina',.... pero esta no duró. En los próximos 15 minutos, desfilaron no menos de 20 personas en la misma dirección; unos profesionales, otros empleados, adultos, jóvenes, variedad por montones. Un proyecto como el que yo me imaginaba no es algo para más de 5 personas así que aquel mar de gente no era algo que me entusiasmara respecto al final de esta historia de 'novedades' y de creatividad.

En resumen, el supuesto gran proyecto terminó siendo un famoso multinivel el cual ya conocía y por el cual no estaba interesado (no tengo nada en contra de ellos, aclaro). No obstante permití que me explicaran todo por educación y esto me dio pie a hacer una reflexión. Y saco una reflexión porque trato de buscar el mensaje que Dios quiere darme en cada acontecimiento de mi vida, especialmente en aquellos que nada tienen que ver con la fe; como aquel del famoso perro vomitivo que marcó a mas de uno de los lectores de este sencillo blog jejeje

Si mostráramos el mismo entusiasmo por salvar almas, como estas personas lo tienen por hablarnos de su negocio, ¡cuan diferente sería el mundo hoy!.
Veamos lo que hacen y cuestionémonos.

Invitación: Normalmente la invitación a este "gran proyecto" viene de un amigo o familiar quien muestra un entusiasmo extraño hacia 'algo'. Por encima de la vergüenza y de muchos otros obstáculos, nos invitan, y la invitación es a algo que 'cambiará nuestras vidas'. ¡Con cuanto convencimiento nos quieren llevar! ¡Cuánto insisten en que conozcamos ese 'proyecto'! insisten, persisten, resisten y finalmente vamos. ¡Y qué decir de los esfuerzos materiales que hacen para que recibamos ese mensaje!: cuadran horarios, transporte, logística, si queremos ¡Van a nuestra casa!. Y yo me pregunto ¿Esté mismo entusiasmo, esfuerzo y perseverancia lo mostramos cuando queremos dar a conocer el mayor proyecto de toda la historia llamado "El plan de Salvación" que nos trazó Dios? ¡Cuántos hacen por dinero lo que nunca harían por su alma! y no mires a tu alrededor, a no ser que estés rodeado de espejos porque es mi reflejo el que encuentro cuando escribo estas lineas.

Motivación: Cuando llegas a estos sitios vas sin saber siquiera que haces ahí. Ese "Yo en qué momento terminé aquí" retumba en tu cabeza desde el momento en que pisas aquel lugar. No obstante encuentras un ambiente favorable; solo ves caras sonrientes, personas motivadas, entusiasmo por doquier. Terminas en manos de alguien bastante simpático, una persona líder, positiva y bastante convencida de lo que te va a decir. Pero nunca te habla de entrada de su producto o de su negocio. Se gasta un largo rato haciéndote ver tu vida, tus aspiraciones, otros caminos que muchos han recorrido con éxito y arrancan de ti continuamente consentimientos a las preguntas que hacen que van dirigidas a que aceptes todo lo que dicen. Impresiona el convencimiento y el ímpetu con que presentan su negocio, mientras que tu y yo ¡que poco nos esforzamos por hacer ese anuncio gozoso del evangelio! ¡Ese kerigma parece ajeno en nuestra boca! O la cara que ponemos no parece la de un cristiano feliz por vivir la vida de Cristo.

Y es que hay cientos de personas que no han escuchado hablar de Jesús, o lo han escuchado muy lejano y nosotros deberíamos tener ese entusiasmo, ese convencimiento de que nuestro mensaje, Su mensaje, cambiará su vida para siempre. Y no será para recibir recompensas pasajeras, será para ganarse el premio inimaginado, inconmensurable, incomparable, de la salvación.
Todos conocemos las miserias espirituales que padecemos lejos de Dios, así como estas personas conocen las miserias económicas y laborales de la mayoría de personas a quienes llegan y es por esto que fácilmente los guían hacia 'esa solución'; el problema es que nosotros sabemos que Jesucristo es la solución de los problemas de todas estas almas sufrientes ¡Y no hacemos nada!. ¡Donde está nuestro entusiasmo! ¿Será que no hemos terminado de creele a Él?

Solución: Una vez que nos han mostrado lo 'mal' que marcha nuestra vida sin su negocio, nos muestra lo que para él es la solución: su negocio; no importa cual sea; sea Omnilife, Herbalife, Amway y otros cientos de mutiniveles, el esquema es bastante similar. Comienza allí toda una serie de razones y de justificaciones de por qué es el mejor y de por qué logrará sacarnos de nuestra 'miseria'.
Nosotros tenemos lo mejor por anunciar: A Jesucristo. La satisfacción está garantizada. Puedes tener la plena certeza que la tasa de devoluciones será de 0% pues Es perfecto. Además tenemos la certeza de que SI le funcionará a todo el que lo recibe y que su vida mejorará indiscutiblemente

Que bueno poder analizar estas cosas y evaluar nuestro papel como misionero de Jesús y de verdad amar con todas nuestras fuerzas nuestra evangelización. Así recordar las palabras de San José María Escrivá de Balaguer:
"Me dices que sí, que quieres. 
—Bien, pero ¿quieres como un avaro quiere su oro,
como una madre quiere a su hijo,
como un ambicioso quiere los honores
o como un pobrecito sensual su placer?
—¿No?
—Entonces no quieres."